Un joven fue masacrado a golpes este sábado a la salida de Buró. Durante este año hubo múltiples reclamos al Intendente Gutiérrez por mayor seguridad en la noche quilmeña. Como respuesta se creó un Comisión de regulación de la nocturnidad y se aplicaron algunas sanciones a distintos locales bailables por falta de habilitaciones.
Sin embargo nunca se reforzó la seguridad en las calles, donde los jóvenes salían de los boliches bailables y, bajo el efecto del alcohol muchos de ellos, resolvían sus pleitos con saldos fatales.
La madrugada del 16 de junio de 2008 Emmanuel Vera fue asesinado a la salida de un boliche en Quilmes Oeste. El joven fue increpado por cuatro sujetos mientras esperaba el colectivo en la esquina de Craviotto y Av. Calchaquí. Los agresores subieron a un Peugeot 206 gris y le dispararon con un arma calibre 9mm para huir luego en dirección a Capital Federal. Su muerte aun sigue impune.
A Matías Cecco Rouco, de 22 años, lo masacraron a golpes a la salida del boliche Buró, en pleno centro de Quilmes. Hasta el momento se detuvieron a dos cuidacoches, -ambos menores- sospechados de haber cometido el homicidio. La policía no estaba en el momento del crimen. El cuerpo presentaba rotura de cráneo. El joven salió del boliche a las 6.40, pese a que la ley de nocturnidad que rige en la provincia ordena que a las 5 de la mañana todos los boliches deben estar cerrados.
En tanto, el dueño de Buró, Guillermo Panebianco, salió descaradamente a solidarizarse con la familia de la víctima e increpó a los medios de comunicación de "enfocar el frente de su local” y de que además, “algunos hablaran de un muerto en un boliche de Quilmes, como si con eso lograran vender más”. INSÓLITO. UN VERDADERO SINVERGÜENZA.
Hasta el momento el Jefe Comunal Francisco Gutiérrez no descartó tomar medidas drásticas respecto a la noche en Quilmes. Mañana reunirá a todos los actores vinculados a la nocturnidad para determinar medidas que serán “ejemplificadoras”, según dijo. “Hay que tener responsabilidad, sino vamos a pensar en que tenemos que suspender la actividad nocturna” afirmó. ¿Tendrá el Intendente la firmeza para castigar de una vez por todas al propietario de la disco Buró? Esta tragedia es irreparable y ningún castigo devolverá la vida de Matías. Pero quienes no tomen medidas contra los responsables de su asesinato serán cómplices de su muerte por permitir y seguir avalando el descontrol en la noche quilmeña.
Sin embargo nunca se reforzó la seguridad en las calles, donde los jóvenes salían de los boliches bailables y, bajo el efecto del alcohol muchos de ellos, resolvían sus pleitos con saldos fatales.
La madrugada del 16 de junio de 2008 Emmanuel Vera fue asesinado a la salida de un boliche en Quilmes Oeste. El joven fue increpado por cuatro sujetos mientras esperaba el colectivo en la esquina de Craviotto y Av. Calchaquí. Los agresores subieron a un Peugeot 206 gris y le dispararon con un arma calibre 9mm para huir luego en dirección a Capital Federal. Su muerte aun sigue impune.
A Matías Cecco Rouco, de 22 años, lo masacraron a golpes a la salida del boliche Buró, en pleno centro de Quilmes. Hasta el momento se detuvieron a dos cuidacoches, -ambos menores- sospechados de haber cometido el homicidio. La policía no estaba en el momento del crimen. El cuerpo presentaba rotura de cráneo. El joven salió del boliche a las 6.40, pese a que la ley de nocturnidad que rige en la provincia ordena que a las 5 de la mañana todos los boliches deben estar cerrados.
En tanto, el dueño de Buró, Guillermo Panebianco, salió descaradamente a solidarizarse con la familia de la víctima e increpó a los medios de comunicación de "enfocar el frente de su local” y de que además, “algunos hablaran de un muerto en un boliche de Quilmes, como si con eso lograran vender más”. INSÓLITO. UN VERDADERO SINVERGÜENZA.
Hasta el momento el Jefe Comunal Francisco Gutiérrez no descartó tomar medidas drásticas respecto a la noche en Quilmes. Mañana reunirá a todos los actores vinculados a la nocturnidad para determinar medidas que serán “ejemplificadoras”, según dijo. “Hay que tener responsabilidad, sino vamos a pensar en que tenemos que suspender la actividad nocturna” afirmó. ¿Tendrá el Intendente la firmeza para castigar de una vez por todas al propietario de la disco Buró? Esta tragedia es irreparable y ningún castigo devolverá la vida de Matías. Pero quienes no tomen medidas contra los responsables de su asesinato serán cómplices de su muerte por permitir y seguir avalando el descontrol en la noche quilmeña.
