LA HERENCIA DE MALENA: Lamadrid lleva años cortada en Rocha y también en Camino General Belgrano. La obra tendría que haber terminado en 2023, estaba presupuestada y licitada, pero el dinero se esfumó y tanto la administración dé Alberto Fernández en Nación, como la de Galmarini en AYSA y la de Mendoza en Quilmes no lograron explicar dónde está ese dinero y por qué no se cumplió con el plazo de 270 días de conclusión. Los comerciantes se fueron a la ruina, pero el Municipio no les perdonó ni un impuesto. Al contrario, hoy Mendoza sigue recaudando y hasta usufructúa y saca provecho de este problema cobrándole multas a la nueva administración de AYSA. Con esto recauda millones mensualmente, pero no le da ninguna solución a los vecinos

Martín Ciccioli se adentró en el conurbano para conocer una obra abandonada que se convirtió en una pesadilla para los vecinos. Se trata de un trabajo que debería conectar el Río Quilmes con la Ruta 21 y dejó una avenida dividida en cinco tramos, generando cortes y caos además de falta de seguridad, robos y asaltos. Los vecinos denuncian continuamente, los locales comerciales no pueden vender y la zona, como si todo fuera poco, sufre falta de presión de agua. Los carteles de madera son lo único que queda de un proyecto que debió terminarse en 270 días y que hoy es una obra fantasma que atormenta a los vecinos: “Te roban, te apuñalan y te asaltan”.