Una pareja fue torturada durante el robo de su vivienda en Quilmes, luego de notar que habían marcado su casa.
Los delincuentes se llevaron objetos personales, dinero de su jubilación, y abandonaron la propiedad dejándolos atados a las sillas. Eduardo, vecino de los dos ancianos, contó que los golpearon y que “están complicados”.
Los vecinos aseguran que las marcas fueron hechas la semana previa al hecho, y observaron actitudes sospechosas de personas cerca de la vivienda.
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