Se trata de Juan Carlos Fernández, Delegado del barrio IAPI y mane derecha del concejal de La Cámpora de Quilmes, Ariel "Lula" Gómez. La DDI de Avellaneda - Lanús, en conjunto con la Policía Federal, allanó su casa. De los seis jóvenes involucrados, dos son parientes del delegado: el hijo y el hermano.
La agente Micaela Romero, que era custodio de la Quinta de Olivos, fue asesinada el pasado domingo durante un asalto perpetrado por seis delincuentes que estaban en tres motos y la interceptaron para robarle. La víctima había salido a comprar cigarrillos junto a un amigo, cuando fue cruzada por los motochorros en Pellegrini y 395, quienes le sustrajeron el celular al hombre y le efectuaron un disparo en el pecho a ella, quien horas más tarde, terminó muriendo en el hospital "El Cruce" de Av. Calchaquí.
Hasta el momento, una de las versiones sobre el episodio –según la tía de la oficial asesinada– sostiene que los delincuentes identificaron a la policía como tal y ese fue el motivo del disparo. Lo cierto es que por el crimen detuvieron a los seis hombres, dos de ellos menores de edad que ya están libres, mientras que otros dos son el hijo y el hermano del Delegado de la IAPI, Juan Carlos Fernández.
El funcionario municipal fue allanado tanto por la DDI de Avellaneda-Lanús como la Policía Federal. Allí, los investigadores acudieron luego del seguimiento al celular robado durante el asalto en el que mataron a Micaela. En el lugar el hijo de Fernández fue detenido junto a su tío, ambos sindicados como participes del asesinato de la oficial Romero.
Drogas, armas y explosivos secuestrados en el allanamiento:
Personal policial realizó ayer por la noche un operativo en Chaco y Calle 175 de Bernal Oeste, domicilio en el que habita el Delegado Municipal del barrio IAPI, Juan Carlos Fernández; donde aprehendieron a uno de sus hijos, quien permanece detenido e incomunicado en una comisaría de Bernal.
Por la señal del GPS rastrearon en ese domicilio el celular que robaron durante el asalto y asesinato de la oficial Micaela Romero. La agencia de noticias TELAM reveló que el hijo de Fernández está imputado también por una causa relacionada con secuestros extorsivos, pero desde fuentes policiales de la ciudad que participaron en el allanamiento indican que la fiscal Karina Gallo -quien tiene a su cargo el caso de Micaela Romero- fue quien dio la orden para llevarlo a cabo en la investigación del crimen.
Fernández es un Delegado que desde hace tiempo esta “en la mira” de las autoridades municipales de Quilmes. Ha tenido varios inconvenientes con los funcionarios de la comuna por no respetar a sus superiores. Se supo –por ejemplo- que cuando se desató la pandemia de Covid, cerró las puertas de la Delegación y licenció sin autorización alguna al personal, pese a ser un trabajo esencial.
Del mismo modo –y como si se tratara de un delegado gremial y no un delegado municipal- se plegó a la huelga que organizó ATE hace un mes atrás.
Fernández responde al concejal de La Cámpora, Ariel “Lula” Gómez; quien ya ha tenido que intervenir varias veces en su favor para evitar que lo desplacen.
"Silencio Stampa":
Por estas horas se espera que el Municipio se expida sobre este caso, ya que al momento ningún funcionario quiso dar testimonio y en la Comuna reina el silencio. A su vez, la oposición tampoco se expresó sobre el tema, pero trascendió que mañana lanzaría un comunicado adelantando un pedido de informes por la gravedad del hecho, pidiendo la inmediata renuncia de Fernández y la investigación del suceso vinculado al aberrante crimen de la joven madre de una niña de 2 años. Dentro del propio riñón del Municipio muchos le aconsejan a la Intendenta que "le suelte la mano" al Delegado, ya que es insostenible su continuidad en el cargo con todo este escándalo.
