14 de septiembre de 2016

El director del Dispensario y el del CREM de Quilmes fueron separados de su cargo: fue tras conocerse fotos fumando marihuana

Dos funcionarios y dos empleadas de la secretaría de Salud del Municipio de Quilmes fueron echados tras la publicación en redes sociales de varias fotos en las que se los ve fumando y armando cigarrillos de marihuana.
El hecho involucró a César Altea, titular del servicio de emergencias CREM, y a Daniel Spena, director del Dispensario Ramón Carrillo de Quilmes Oeste, así como también a dos mujeres que cumplían funciones administrativas.
Las fotos fueron tomadas en un ámbito privado y no en una dependencia pública: se trataba de una reunión, en lo que parecería ser la casa de uno de ellos, y se viralizaron por las redes sociales.
La secuencia fotográfica llegó a las manos de Miguel Maiztegui, el secretario de Salud de Quilmes, quien confirmó que los cuatro involucrados en el episodio fueron dados de baja el viernes pasado en la Municipalidad.
"El viernes a última hora de la tarde se viralizaron algunas imágenes de dos funcionarios y dos empleadas consumiendo droga, marihuana. Entonces tomé la determinación de dar de baja a uno de los funcionarios que era el director del CREM y dos empleadas que trabajaba ahí, esos fueron dados de baja", detalló Miguel Maiztegui, secretario de Salud de Quilmes.
El funcionario explicó que también separó de su cargo "al director del dispensario que era otra de las personas involucradas y se le inició un sumario administrativo". "Al frente del CREM ahora está Pablo Larumbe, y en el dispensario Ramón Carillo donde se desplazó al director ahora está Alejandro Goya", precisó.
Consultado por sobre cómo se enteró de la noticia, Maiztegui sostuvo que fueron unos "colaboradores" quienes le mostraron las fotos que ya se habían viralizado. De allí fue que comenzó a "recibir llamados de todos lados", contó.
"No hay toleraría en ninguna situación con rango municipal, como director o como jefe de un área de medicina que se droguen. El problema acá es que son funcionarios públicos y tienen cierta jerarquía, es imposible sostenerlos. Lo único que hice fue informarle al intendente (Martiniano Molina) lo que iba a hacer y estuvo de acuerdo", agregó el funcionario.
Uno de los temas que más se remarcó cuando trascendió la noticia era que Altea, a cargo de un área de emergencias, no era médico. "El subdirector de emergencias que se llama Pablo Larumbe era el jefe en la realidad, el ahora extitular era un jefe operativo (que quiere decir organizador) por lo que no tenía ninguna incumbencia en la parte médica", aclaró.