El así apodado “hombre gato” fue detenido por efectivos del Destacamento Villa Argentina en la intersección de Urquiza y Uruguay
EL MOTE SE LO PUSIERON LOS VECINOS, PORQUE VARIAS CASAS DE QUILMES OESTE HABÍAN SIDO ASALTADAS POR EL MISMO HOMBRE, EN FECHAS RECIENTES. ADEMÁS, TENÍA ANTECEDENTES POR DELITOS COMETIDOS DE LA MISMA MANERA. SALTABA PAREDES Y CERCOS PERIMETRALES, E INGRESABA POR TECHOS Y VENTANAS A LAS CASAS.
Personal del Destacamento Villa Argentina que trabaja a las órdenes del Oficial Principal Diego Castro, detuvo a un hombre que asaltaba viviendas en la zona de Quilmes Oeste, ingresando al trepar muros y techos.
Por el modo en que cometía los robos, y por los que se le atribuyen, que no son pocos, todos cometidos en la zona de Quilmes Oeste, al malviviente se lo conoce con el mote de hombre gato.
El sujeto no sólo trepaba muros para entrar a los terrenos de las viviendas, sino que ya en estos utilizaba ventanas, aún de pequeñas dimensiones, para ingresar a cada casa. El hecho que permitió detenerlo se registró el jueves por la tarde, cuando personal policial del destacamento Villa Argentina que se hallaba recorriendo la jurisdicción, fue demorado por una vecina en Urquiza y Uruguay.
La mujer detuvo a los uniformados y les dijo que un sujeto había saltado un paredón de 3 metros, para luego, desde allí, escalar hacia un balcón de una habitación en la planta alta de su casa.
Por el modo en que cometía los robos, y por los que se le atribuyen, que no son pocos, todos cometidos en la zona de Quilmes Oeste, al malviviente se lo conoce con el mote de hombre gato.
El sujeto no sólo trepaba muros para entrar a los terrenos de las viviendas, sino que ya en estos utilizaba ventanas, aún de pequeñas dimensiones, para ingresar a cada casa. El hecho que permitió detenerlo se registró el jueves por la tarde, cuando personal policial del destacamento Villa Argentina que se hallaba recorriendo la jurisdicción, fue demorado por una vecina en Urquiza y Uruguay.
La mujer detuvo a los uniformados y les dijo que un sujeto había saltado un paredón de 3 metros, para luego, desde allí, escalar hacia un balcón de una habitación en la planta alta de su casa.