4 de mayo de 2010

Concejales panqueques: ¿El cambio de autoridades ya es un hecho?

LOS INTERESES ECONÓMICOS PRIMAN SOBRE LOS VALORES MORALES. IMAGÍNESE QUE UN EDIL QUE “TENÍA” ASPIRACIONES AL 2011 POR UN PARTIDO “OPOSITOR” ENTREGUE SU APOYO Y EL DE LOS CONCEJALES DEL BLOQUE QUE PRESIDE PARA QUE EL OFICIALISMO RECUPERE LA PRESIDENCIA DEL CONCEJO DE QUILMES ¿SERÍA UN “MUERTO POLÍTICO”? ¿SUS ASPIRACIONES EXPIRARÍAN JUNTO CON SU CREDIBILIDAD Y LA DE LOS EDILES DE SU BLOQUE QUE ACOMPAÑARÍAN SU VERGONZOSA "BOROCOTEADA"?

ESCRIBE ÁLVARO CHINELLI:
Imagínese lector que usted es un concejal de Quilmes que pasó por el Radicalismo, pero que ahora preside el bloque Unión-Pro y en diciembre aportó uno de los 14 votos que la oposición precisaba para recuperar las autoridades del Concejo Deliberante que, hasta el momento, estaba en manos del oficialismo.
Imagínese que, luego de eso, dos concejales que votaron a favor de la oposición se pasen al oficialismo y que usted despotrique y los tilde de “miserables de la política” en un eufórico discurso aplaudido por los que después traicionará usted también.
Imagínese que el concejo queda empatado 12 a 12, y que el oficialismo hace todo lo posible para recuperar la presidencia: falta a las sesiones e intimida con barras golpeando paredes e insultando mientras se intenta sesionar, hasta que un día encuentra una manera de obtener ese concejal que necesita para lograr el recambio de autoridades…
Imagínese que usted, concejal "opositor" es dueño de un 23% de una empresa que se dedica a hacer Obras Públicas, y del que gana alrededor de 2 millones y medio de pesos. Imagínese que esa empresa tiene un contrato con el Municipio de Quilmes para hacer esas Obras públicas. Imagínese que desde el Municipio amenazan al dueño de la empresa con romper el contrato millonario si usted no se da vuelta en el Concejo, si no le cede el “apoyo” para el recambio de autoridades. Pero hasta el momento usted juró y recontra juró que no apoyaría al oficialismo, y apoyarlo se contrapondría a lo que usted pregonó, y además, destruiría su credibilidad y la confianza que la gente depositó en usted al votarlo en los últimos comicios de junio. ¿Qué haría usted? ¿Negociaría con el gobierno? ¿Seguiría sus intereses económicos o respetaría ratificaría su papel de opositor, aquel al que corresponde el partido en el que lo votó la gente?
Imagínese, con todo respeto señor lector, que usted siga el camino más fácil: que sea un sujeto CARENTE DE PRINCIPIOS y que SOLO LE IMPORTE SU BOLSILLO, destruyendo la confianza de los que votaron por usted. Entonces imagínese que decide apoyar al oficialismo, sabiendo que de esta forma se convertirá en un “MUERTO POLÍTICO”, pero priorizando ante todo sus intereses económicos. Entonces usted traiciona a todos los que lo creyeron honesto, y, no conforme con eso, arrastra a los concejales del bloque que preside a hundirse con usted. Destruye la credibilidad del partido Unión-Pro en el distrito de Quilmes. En ese marco imagínese que la gente se preguntaría por qué sus ediles lo acompañarían, arruinando de esta forma su reciente carrera política en su primer año como concejales. Pero imagínese que la primera edil que lo acompaña sea una mujer que fue -por varios años- secretaria suya, y que justamente usted la ubicó donde está a sabiendas de la lealtad que tiene por usted. Sin embargo la gente se seguiría preguntando por el otro edil. Se sorprendería, pues imagínese que ese otro edil “cierta vez” haya sido calificado por un periódico local (que podría ser tranquilamente "5 Días") como "uno de los posibles concejales que tiene acercamientos al oficialismo para el recambio de autoridades". Entonces imagínese que, indignado, el edil haya enviado un comunicado a todos los Medios desmintiendo y desligándose del oficialismo, afirmando que seguiría cumpliendo en el legislativo su rol como opositor y que "NUNCA PERDERÍA DE VISTA QUE FUE VOTADO POR LA OPOSICIÓN”. Entonces la gente creería que finalmente LO PERDIÓ DE VISTA, y lamentaría de esta forma que los ediles que ingresaron al concejo por Unión-Pro se pasen a la vereda de en frente, exceptuando, hasta el momento, a dos concejales que, ingresados por el Pro, seguirían cumpliendo su rol de opositores desde el peronismo disidente.
Puede ser que esto no sea más que una "lamentable" suma de hipótesis, o que nosotros tengamos mucha imaginación, pero imagínese que esta historia fuera real ¿No sería un bochorno? Como siempre, el tiempo dirá.