Mensaje de los departamentos de "Justicia y Paz" y "Pastoral Social", pertenecientes a la Vicaría de Solidaridad de la Diócesis de Quilmes, frente a los dichos del Presidente de la Nación en Davos, Suiza.
El texto completo se trascribe a continuación.
“Hermanos, ustedes que creen en nuestro Señor Jesucristo glorificado,
no hagan acepción de personas”
(Carta de Santiago 2,1).
Honrando la memoria de nuestra historia diocesana; y reafirmando nuestro presente en sus cauces pastorales (Opción Preferencial por los Pobres, Misión permanente, Derechos Humanos y Diálogo Ecuménico e Interreligioso), no podemos menos que reaccionar ante los dichos del Presidente de la Nación, Javier Milei, en el Foro de Davos hace pocos días.
Allí se pretende desacreditar una historia de lucha por la inclusión social, la integración de las minorías, contra la discriminación y la promoción de derechos como “agenda woke”. Algo así como una serie de realidades impuestas autoritariamente a la sociedad occidental por una supuesta “izquierda marxista”. Olvidando las luchas sociales y los debates parlamentarios que supuso cada una de estas reivindicaciones.
El concepto “woke” nace como una metáfora del “despertar” de la conciencia social y política frente a discriminaciones que estaban sumergidas y olvidadas. Concepto que es ridiculizado en la referida exposición de nuestro mandatario.
Tratar al antirracismo, al feminismo, a la lucha por los derechos de las personas que forman parte de la comunidad LGBTIQ+ como “cáncer que hay que estirpar” en nombre de la “libertad” o del “sentido común”, nos parece muy preocupante.
No podemos, no debemos, permanecer indiferentes a expresiones de discriminación y violencia sobre minorías. Podemos estar o no de acuerdo con posicionamientos o ideas. Pero no podemos dejar de abrazar y acompañar desde los principios evangélicos a las personas que integran estos colectivos.
El mismo Papa Francisco nos invita sinodalmente a construir una Iglesia que sea “Casa de Todos”, “Hospital de campaña”, donde entran todos y todas, especialmente aquellas personas más sufrientes y marginadas.
Llamamos una vez más a reflexión y al diálogo fraterno y democrático, imprescindible para el bien del Pueblo de nuestra Patria.
Departamento de Justicia y Paz
Departamento de Pastoral Social
Vicaría de Solidaridad
Diócesis de Quilmes
Quilmes, 25 de enero de 202