La conducción de Argentino de Quilmes, estropeó el sueño del hincha que se ilusionó con un ascenso que quedó trunco. Una mirada simple responsabilizaría a los jugadores que no convirtieron sus penales pero el análisis profundo encontrará a los verdaderos responsables: el presidente Hernán Romero, el «gerenciador» Miguel Pires, el vice Eduardo Larosa y el «colaborador» Javier Campesi. En una final cargada de sospechas, Los Andes se impuso ante Argentino de Quilmes en la definición por penales. El Mate ganó por 1 a 0 en tiempo regular, con gol de Javier Martínez de cabeza a los 7 minutos. Este resultado llevó la serie a los penales, debido a que en el partido de ida el Milrayitas había ganado por el mismo resultado. Desde los 12 pasos, en una emotiva definición, pasó el conjunto de Lomas de Zamora que buscará el ascenso ante Sarmiento de la Banda. El partido jugado en la Barranca quilmeña tuvo varios contratiempos: en un acto de clara censura, la directiva de Argentino de Quilmes rechazó las acreditaciones de los medios visitantes y de algunos de la prensa nacional que habían sido críticos con el Mate y se les avisó horas antes del encuentro que no se les iba a permitir trabajar. Otro hecho repudiable fue el cambio de árbitro que motivó un retraso de una hora en el inicio del partido. El árbitro Ignacio Lupani que había sido designado 48 horas antes para dirigir este partido, cuando siempre los árbitros se dan a conocer el martes de cada semana. Lupani hacía 5 meses que no dirigía y solo había jugado cinco partidos en toda la temporada, uno de ellos lo había beneficiado a Argentino de Quilmes. Por lo que su designación levantó mucha polémica y fue repudiada por Los Andes, quienes estaban seguro que los iba a perjudicar. El árbitro denunció que recibió amenazas y cuarenta minutos ante del partido, decidió que él y todos los asistentes no estaban en condiciones de dirigir. Por lo que fueron reemplazados de apuro por una terna de Primera División encabezada por Leandro Rey Hilfer. En los penales, el Mate tuvo el pase a la final pero Alegre Rojas falló el quinto penal y no pudo aprovechar la atajada de Tello a Blondo. Luego en el uno a uno, Vila desvió su remate y le dio el pase a la final por el ascenso a Los Andes. En el final, Leonardo Lemos que soportó todo tipo de insultos y agresiones durante toda la tarde fue víctima de un hecho de violencia cuando ingresó gente a pegarle. Un verdadero bochorno. Argentino de Quilmes vive momentos oscuros, desde su conducción y es uno de los equipos más odiados del fútbol argentino. Su rica historia quedó hecha pedazos por la actual conducción del club. FUENTE DEL TEXTO: https://elsolnoticias.com.ar/argentino-de-quilmes-estos-son-los-verdaderos/
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