El hecho ocurrió en Bernal, cuando una vecina fue sorprendida por delincuentes en su domicilio. La torturaron y le robaron sus pertenencias.
Delia, una jubilada de 89 años, fue sorprendida en su domicilio, ubicado en Chiclana e Independencia. El hecho ocurrió en la madrugada del pasado domingo, cuando tres malvivientes irrumpieron en su casa, donde la redujeron y torturaron durante tres horas, para luego darse a la fuga con sus pertenencias.
Tras ese infierno, la mujer hizo público el acontecimiento, durante una entrevista en Canal 9 la mujer aseguró que: “Entraron los tres juntos corriendo en un piso de madera, me sorprendieron y empecé a gritar. Me taparon la boca, bajaron la persiana porque tenía la luz prendida. Preguntaba qué pasaba y me dijeron que no iba a pasar nada, que esté tranquila”, contó la mujer y agregó: “Me senté en la cama, me llevaron para el pasillo y en una silla me quedé sentada. Estando ahí siempre con el que me quede tranquila, les dije que me quería tomar una pastilla para la presión. Me los trajeron y también agua”.
La mujer aseguró que todo el tiempo le exigían cosas de valor, por lo que decidió entregarles 12 mil pesos y algunos dólares que tenía en su casa. “Me preguntaban si era italiana porque tienen la fantasía que cobro la jubilación en euros y tengo joyas”, manifestó la jubilada.
Cabe mencionar que, la víctima denunció más detalles sobre el violento episodio: “Me ataron con un pañuelo en el cuello, me pasaron una remera por la cabeza porque si no les decía dónde estaba la plata me dejaban en una villa tirada o una plaza. Me rompieron todo, me querían abrir hasta la estufa. Le dije si yo te miento puedes hacerme lo que quieras y golpear pero como no había nada”.
No obstante, la damnificada aseguró que no sabía qué hora era y no comprendía lo que ocurría. “Le preguntaba a uno si tenía abuela porque yo podría serlo, por qué hacen eso. Los otros dos solo hablaban de plata y nos vamos enseguida”, concluyó.














