El hecho tuvo lugar en las calles Padre Bruzzone, entre Río Desaguadero y Río Atuel, lugar en donde un pequeño de tan sólo 11 meses comenzó a ahogarse y a tener problemas para respirar.
Rápidamente, habitantes del barrio llamaron a la policía, que al llegar y ver la situación, según informaron, no quisieron practicarle tareas de reanimación debido a que no estaban preparados.
De tal manera, tampoco quisieron llevar a la criatura a un centro de salud, lo que provocó que lugareños se desesperen: "¿Cómo no lo van a llevar? Es una vergüenza. ¿No ves que se está muriendo?", expresó una testigos.
Cabe destacar, que el pequeño fue llevado al Hospital que se encontraría en buen estado de salud.
