1 de mayo de 2020

Miles de quilmeños reclamaron anoche en contra de la liberación masiva de presos: cientos de detenidos fueron excarcelados durante la última semana, entre ellos asesinos, violadores, femicidas y hasta condenados por crímenes de Lesa Humanidad. Algunos de ellos retornaron a la cárcel en menos de 24 horas por volver a delinquir

La excarcelación de detenidos y el otorgamiento del beneficio de la prisión domiciliaria a partir de evitar la propagación del coronavirus en las cárceles generó un contundente rechazo en diferentes sectores del distrito. A diferencia de lo que había ocurrido el miércoles, el cacerolazo de ayer fue más intenso.
La liberación de presos en medio de la pandemia del coronavirus sigue generando polémica y el tema genera distintas posturas en la sociedad. Este jueves se produjo un masivo cacerolazo en la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano y otras ciudades del país en protesta por la excarcelación de detenidos.
La manifestación fue convocada para las 20 horas, cuando en distintos barrios de Quilmes, sobre todo en los centros, se empezaron a escuchar el ruido de las cacerolas. La protesta fue replicada en distintas ciudades del país, que mostraron su repudio a la liberación de detenidos que son beneficiados con prisión domiciliaria debido al hacinamiento por la sobrepoblación carcelaria.
#NOLOSLIBEREN:
Miles de personas se muestran en contra de las excarcelaciones que ya se produjeron -salieron 753 presos de las cárceles bonaerenses y más de 200 de las federales, entre ellos asesinos, violadores y ladrones, algunos de ellos retornaron a la cárcel en menos de 24 horas por volver a delinquir, más otros casos de femicidas y violadores que tienen domiciliaria a pocos metros de las casas de sus víctimas-. Pero también las que se planean de ahora en más. La medida busca liberar un porcentaje aún no precisado de los detenidos "para evitar los contagios masivos". En el sistema carcelario, la propagación del virus se produciría entre 8 y 10 veces más rápido de lo común, señalan.

Lesa Humanidad:
En el Servicio Penitenciario Federal hay 132 detenidos por estos crímenes. La mayoría pertenecen a grupos de riesgos por su edad o por su salud. Algunos ya consiguieron una respuesta favorable de la Justicia y cumplirán la condena en sus domicilios. Uno de los que consiguió que lo enviaran a su casa, en calidad de detenido, fue el represor Carlos Reinhart, de 65 años. Lo llamaban “El Carnicero” porque se encargaba de picanear a los detenidos ilegalmente. Fue reconocido por 35 víctimas en el juicio denominada subzona 14 de Santa Rosa, en La Pampa. Reinhart estaba alojado en la enfermería de la Unidad 4 del penal de esa ciudad, en un área destinada para el protocolo ante casos sospechosos del Covid-19.
En Mendoza se concedieron una decena de arrestos domiciliarias de manera cautelar, excepcional y provisorio, incluso para acusados que estuvieron prófugos.