29 de marzo de 2020

La historia de la abuela quilmeña de 104 años que realizó más de 3 horas de fila y no pudo cobrar su jubilación

A una semana del inicio de la cuarentena obligatoria en todo el país, los cajeros automáticos de Quilmes se convirtieron este viernes en puntos de concentración de personas que hicieron largas filas para conseguir efectivo. Según el Banco Central, el pago de jubilaciones y AUH (11 millones de haberes, desde ayer) hicieron que la gente se concentre frente a las terminales de extracción de efectivo. 
Siguiendo esta línea, en la mañana de este viernes largas filas se generaron en torno a los cajeros de Quilmes centro, Oeste, Bernal y Solano. En este sentido, en el banco Supervielle de Quilmes centro, una abuela de 104 años realizó más de 3 horas de fila, con todos los riesgos que esto implica, sin poder finalmente cobrar su jubilación porque los cajeros se quedaron sin dinero. 
La jubilada, que vive en Ezpeleta, cobra sus haberes por el banco Supervielle (uno de los principales agentes financieros de los jubilados en el país). En dialogo con la prensa, la abuela se mostró resignada por no haber podido cobrar sus haberes, pero lo más desolador fue cuando declaró "lo que más me duele es que mañana voy a tener que sufrir todo esto de vuelta, porque no me queda otra que volver, no me queda otra hijo", le dijo al periodista.