9 de diciembre de 2019

La joven cantante quilmeña, María Becerra, es la youtuber con el vídeo más visto de 2019 en Argentina: se trata de "Roast Yourself Challenge", que tiene 6,4 millones de reproducciones

Un video publicado por una youtuber oriunda de Quilmes, de 19 años, es el más visto del año en la Argentina, según un informe difundido hoy por YouTube con los contenidos con más repercusión en el país y el mundo. Se trata del video "Roast Yourself Challenge" de María Becerra, que tuvo también la mayor cantidad de comentarios (62.000) y de likes (467.000) de la plataforma, en la que llegó a las 6,4 millones de visualizaciones. Maria de los Angeles Becerra nació en Quilmes el 12 de febrero de 2000, es una cantante muy reconocida por las nuevas generaciones debido a los vídeos de entretenimiento que postea en las redes sociales desde 2015, año en el que creó su canal en You Tube.

En 2017 comenzó a subir videos haciendo covers a capella de artistas como Rihanna, Ariana Grande y otros artistas. Publicó su primer extended play (EP) el 11 de septiembre de este año. Su sencillo "Dime cómo hago" logró ingresar en el listado Argentina Hot 100 de Billboard, marcando así su primera entrada en la lista. El 20 de marzo de 2019 lanzó su Roast Yourself Challenge, el video que rompió todos los records. Actualmente cuenta con más de 2 millones de suscriptores y más de 200 millones de reproducciones en su canal de YouTube, al igual que forma parte de la lista de los 10 youtubers más influyentes de Argentina. Cuando cursaba quinto año de la escuela secundaria se vio forzada a elegir entre los videos o sus estudios. "Tenía diecisiete años, ganaba plata haciendo videos y el colegio me sacaba mucho tiempo. Tuve que abandonarlo porque no podía con las dos cosas. A mi familia y a mí nos servía mucho el dinero y no podía darme el lujo de perder esa oportunidad", contó en declaraciones a la prensa. También reveló que la fama le trajo algunos dolores de cabeza, ya que cuando iba a la escuela los fanáticos la seguían hasta su casa o la esperaban afuera. "Una vez me sacaron fotos desde la ventana de mi habitación mientras me cambiaba. Otra, en un baño de una estación de servicio se trepaban a los inodoros para hacerlo. Fueron situaciones horribles", recordó.