25 de julio de 2019

La terrible inseguridad en Quilmes destruyó a una de las empresas más legendarias del distrito: el dueño de “Capitán del Espacio” quiere cerrar la fábrica tras el violento robo. 45 familias quedarían en la calle

Mario Díaz, dueño de la mítica empresa de alfajores "Capitán del Espacio", fue contundente ante los Medios nacionales: "Si me preguntan qué quiero hacer, quiero cerrar e irme". 
El hombre fue asaltado por cinco delincuentes que ingresaron a su vivienda de Aristóbulo del Valle 33. La entradera fue violenta: lo golpearon y lo maniataron hasta que se escaparon con dinero en efectivo y las llaves de la fábrica. 
Aún en shock por el traumático hecho, Díaz se sinceró: "Si me preguntan qué quiero hacer, quiero cerrar e irme. Pero hay 45 familias que están atrás". El robo se produjo ayer alrededor de las 18.20, cuando el empresario llegaba acompañado de su esposa a su casa ubicada sobre la calle Aristóbulo del Valle 33, en Quilmes. 
"Llegaba de la empresa y estaba entrando el vehículo en el garage. Cuando voy a cerrar, se me meten cinco personas adentro. Yo me resisto porque no quería que entraran a mi casa. Me golpearon en la cabeza mal, me golpearon el cuerpo, me maniataron a mí y a mi esposa", relató Díaz en diálogo con el periodista Luis Novaresio, por radio La Red. Según lo denunciado, los ladrones lograron sustraer una suma de dinero en efectivo, objetos de valor y las llaves de la fábrica de alfajores, ubicada a la vuelta sobre la calle Gran Canaria al 300, adonde se dirigieron luego de escapar de la vivienda del empresario. Los pesquisas intentaban determinar si se trató de un robo premeditado y si conocían la ocupación de la víctima, como así también si llegaron a llevarse pertenencias de la fábrica. Para Mario Díaz no hay dudas de que el robo estuvo preparado: "No fue al voleo, eso seguro". Y agregó: "No sospecho de nadie, pero evidentemente no puede ser que supieran tanto". Consultado sobre las cuentas financieras de la planta, el dueño de Capitán del Espacio afirmó: "No es fácil la situación económica. Gracias a Dios la empresa la tenemos saneada y la estamos piloteando. La fiesta hay que pagarla". Interviene en la causa el fiscal Ariel Rivas, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial de Quilmes, quien caratuló el hecho como robo agravado por el empleo de arma de fuego y ordenó el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona para poder identificar a los asaltantes.