18 de diciembre de 2018

El femicida quilmeño, Lucas Azcona, denunció que guardias del penal de Ezeiza lo violaron y le introdujeron un palo de escoba en el recto: la Justicia allanó el pabellón C, donde secuestraron la escoba y un "calzoncillo con sangre"

El femicida quilmeño, Lucas Azcona, condenado por el crimen de la estudiante chilena Nicole Sessarego Bórquez, denunció que fue violado por guardias en la cárcel de Ezeiza. Azcona acusó a miembros del Servicio Penitenciario Federal por abuso. Lo hizo luego de presenciar una presunta golpiza al "Pata" Medina. 
Lucas Ariel Azcona, el joven condenado a prisión perpetua por haber asesinado de 11 puñaladas a la estudiante chilena Nicole Sessarego Bórquez, en 2014, denunció que guardias del Servicio Penitenciario Federal lo violaron con un palo de escoba en el penal de Ezeiza. Sin embargo, el detenido fue sometido a un peritaje realizado por expertos del Cuerpo Médico Forense, cuyo resultado dio negativo respecto a un abuso sexual. Esta semana se continuará con otros estudios para corroborar la versión del joven. La denuncia fue radicada la semana pasada en el Juzgado Federal 2 de Lomas de Zamora, a cargo del juez Federico Villena, por la presunta violación. El abogado Jorge Borgo, representante de Azcona, contó que su defendido, alojado en la cárcel de Ezeiza, había estado presente en una supuesta golpiza que recibió el sindicalista Juan Pablo "Pata" Medina, detenido desde 2017. Según el letrado, Azcona presenció todo y les dijo a los penitenciarios que los iba a "denunciar ante la Comisión de Derechos Humanos". De acuerdo a la versión del joven, al día siguiente, en la madrugada del lunes 10 de diciembre, entraron a su celda entre tres y cuatro efectivos que lo encandilaron con una linterna. El condenado a perpetua aseguró que en represalia a sus dichos lo atacaron a golpes y lo violaron con un palo de escoba. "Pedimos que ahora sea monitoreado permanentemente por las cámaras de seguridad para que tenga mayor seguridad", añadió Borgo. Según el letrado, el juez Villena ordenó un allanamiento en el pabellón donde está Azcona y secuestraron la escoba y un "calzoncillo con sangre". Sin embargo, el Cuerpo Médico Forense descartó que haya habido un abuso sexual y una de las hipótesis es que se trató de una falsa denuncia. En los próximos días harán nuevas pericias.