16 de noviembre de 2018

Uno de los anarquistas detenidos por poner bombas en el Cementerio de Recoleta es de Solano: el detenido también está implicado en el asesinato del baterista de “Superuva”

El hombre detenido por las explosiones en la tumba de Ramón Falcón en Recoleta es del barrio Los Eucaliptos de San Francisco Solano. Hugo Alberto Rodríguez, el militante anarquista que fue detenido en el cementerio de La Recoleta cuando junto a su pareja; intentaba colocar bombas caseras en tumbas de esa necrópoli; vivió hasta el año pasado en una humilde vivienda de la calle 862 entre 898 y 899 de San Francisco Solano. Rodríguez estuvo varias veces detenido. Por estupefacientes y por robo. Luego de ser liberado su madre lo echó de la casa, en la que vivió por muchos años. “Siempre fue un pibe pendenciero. Siempre sucio, en contra de todo. Buscaba problemas permanentemente y lamentablemente para él; terminó como vivió. Es una pena por la madre que no tiene nada que ver con todo esto y tal vez, cuando averigüen; van a ir a la casa a allanarla” – relató a este medio un vecino que lo conoce desde hace años. A Rodríguez le decían “Huguito el sucio” o directamente “El Roñoso”. Un vecino jocosamente nos señaló “SI lo amenazaron con un jabón, Huguito los mandó a todos en cana”. El militante anarquista fue detenido ayer junto a Anahí Esperanza Salcedo, quien habitaba en forma ilegal junto a un grupo de 12 más; un conventillo de la calle Pavón en el barrio de San Cristóbal. Era quien empujaba la silla de ruedas con la que ambos se hicieron pasar por familiares de fallecidos para ingresar al cementerio. 
Su nombre no es la primera vez que aparece en las páginas policiales. En febrero de este año, cuando otro militante anarquista; Cristian Ariel Genez; asesinó a Juan Ledesma; baterista de la banda punk “Superuva” en un boliche de Quilmes Oeste; Hugo Rodríguez fue identificado como uno de los participantes de aquella trágica jornada. Y en las últimas horas se comprobó que Genéz habitaba el conventillo de la calle Pavón donde se resguardaba la banda anarquista. En el operativo dispuesto por la justicia se encontraron bombas de fabricación casera, pólvora, clavos y bulones convenientemente cortados para expandir el daño de los explosivos. Las pintadas sobre las paredes indican el resentimiento y el odio de estos grupos no sólo contra el gobierno; sino con la sociedad. Los anarquistas no creen en el Estado al que consideran “un aparato represivo contra la libertad del ser humano”. Sin embargo la pareja de Rodríguez, Anahí Salcedo, cobraba del Estado, al que desprecia, la Asignación Universal por Hijo por cada uno de sus primogénitos. Según el testimonio de un vecino ante este medio, Rodríguez anduvo por Los Eucaliptos la semana anterior., aunque hacía mucho no se lo veía por el barrio, donde habitó la mayor parte de su vida. Tal vez para visitar a su madre, con la cual debía tener seguramente alguna relación de afecto; pese a que ésta lo echó de la vivienda familiar. En Los Eucaliptos la detención del joven anarquista fue el comentario de todos los vecinos, quienes aprovecharon para sumar historias, algunas seguramente ciertas y otras no. La preocupación de la gente del lugar es por lo que pueda ocurrirle a la madre de Rodríguez, a quien consideran una buena mujer, de trabajo; incapaz de tener algo que ver con las actividades delictivas de su hijo. (Fuente: Quilmes Ahora)