Miguel Ángel Pichetto pasó un mal momento este jueves cuando arribó al club El Porvenir de Quilmes, donde realizó un acto con la presencia de varios dirigentes peronistas.
El senador se bajó del vehículo a metros del lugar, pero antes de ingresar tuvo que enfrentarse a un numeroso grupo de personas que lo escrachó con carteles que lo acusaban de "traidor" y de ser "igual a Macri".
Pasada esa situación, se desarrolló tal como estaba previsto el acto en el interior del club. Allí adelantó que el próximo 6 de octubre participará de "un gran encuentro" con los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta) y Juan Manzur (Tucumán) para lanzar un espacio político que apunte a "construir una opción para los argentinos".
Tal como lo viene haciendo en sus últimas apariciones Pichetto marcó distancias con la ex presidenta Cristina Kirchner, a quien acusa de haberse ido del peronismo: "Nosotros nunca nos fuimos. La construcción de Unidad Ciudadana define un espacio ideológico distinto".
Y luego agregó: "Sabemos que hay compañeros ahí, lo que tenemos que hacer es construir una alternativa para que esos compañeros vuelvan al espacio del peronismo".
También hubo críticas para la gestión de Mauricio Macri: "Solamente con ajuste es imposible. Hay que generar aumento de la demanda interna y una fuerte revolución exportadora fundamentalmente de la mano de la producción agropecuaria y el apoyo industrial".
En ese sentido, criticó que haya "tarifas dolarizadas en materia de servicios que han impactado de manera demoledora en el salario", el "proceso de paritarias a la baja" y que se le haya "fijado a la industria retenciones a la exportación".
Por último, el dirigente oriundo de la provincia de Río Negro se refirió al tema educativo y la discusión sobre el Presupuesto Nacional: "Tenemos que mantener y ayudar a nuestras universidades. Ahora en el Presupuesto tenemos que discutir los niveles de inversión en la universidad, porque los recursos hoy no les alcanzan".
