5 de agosto de 2018

Este domingo "De cinco a mil voces" en el Club Cultural Interlunio de Quilmes

Dos obras, poesía y un agradable momento para disfrutar entre amigos! Los esperamos a todos para ser parte de este evento!
¡No se lo pierdan!

La bruta espera - Vicky Martello y Belu de Mendonça
Ni aun vencidas - Dani Ve, Lett Bertoncello y Daniela Emilse Calvo
Poesías a cargo de Stella Fernández

Dirección: Flavia Campana
Asistente de dirección: Elio Javier Tolosa

Interlunio Club Cultural
Dorrego 488, Quilmes

Les dejamos unas palabras a cargo de Manuel Rodriguez sobre "DE CINCO A MIL VOCES"


Si retratamos lo subterráneo y lo invisible, siempre estaremos frente a la premisa de que lo personal es político.
Si retratamos cinco voces, no queda más que preguntarnos por el sentido común de las cosas.
El sentido común al que tanto apelamos es tan violento como el secreto a voces que rodea a estas dos obras.

Patio interno de un hospital.
En el único lugar donde se cree poder escapar al juicio bruto, dos parturientas sacan a pasear a la maternidad personificada. 
La dulce espera es acaso bruta, o viceversa.
Las debilidades humanas acongojan al espectador, así como la maternidad que, agazapada, espera su turno para presentarse en forma de prejuicio, pesadilla o, quizás, de bendición.

Al otro lado de la calle, las instalaciones de una pequeña papelera.
Tres caras de una misma situación.
El silencio siempre especula cuando siente los pasos del jefe en el pasillo. Pero aun así, muy por debajo de la superficie, encuentra el momento para darse a conocer.
Lo invisible es tan fuerte que la ausencia se hace letra y podemos así presenciar el problema sin tenerlo frente a nuestros ojos.

Buscar identificaciones en estos dos retratos de lo actual no significa encontrar una solución a los problemas que nos oprimen, sino hallar los rasgos empáticos para poder ver mucho más allá y así dejar de lado el egoísmo ultrajante de enunciar la primera persona a la hora de hablar respecto de la libertad del otro.
Buscar una identificación es encontrar un punto de encuentro con lo que vemos acá. Es, ni más ni menos, el clic que nos incita a salir a derribar el sentido común que se apropia de nosotros.
La libertad y la justicia no se construyen hablando de uno mismo, sino luchando por la libertad y la justicia de los demás, ya que lo único más grande que el amor a la libertad es el gran rechazo a quien nos aleja de ella.