El jefe comunal de Quilmes recibió al intendente electo en la Casa de la Cultura de Quilmes. “El objetivo fue encontrarnos para ir generando un proceso de transición ordenado, como corresponde en un sistema democrático, respetuoso de la voluntad popular” destacó Gutiérrez luego de la reunión. Por su parte, Molina sostuvo que “agradezco el gesto; esta es una muy buena demostración y un buen ejemplo”.
El intendente de Quilmes, Francisco Gutiérrez, recibió esta mañana al intendente electo el pasado domingo, Martiniano Molina en la Casa de la Cultura de Quilmes.
Luego de la reunión de cara a la transición del gobierno municipal, Gutiérrez destacó que “el objetivo fue encontrarnos para ir generando un proceso de transición ordenado, como corresponde en un sistema democrático, respetuoso de la voluntad popular; por eso agradecemos a Martiniano que haya tenido el gesto de venir. Le transmitimos todo lo que se está haciendo para que cuando debamos entregar el mando encuentre un Municipio ordenado en todas las áreas.
Asimismo, el jefe comunal destacó que “nosotros le garantizamos toda la colaboración para que la gobernabilidad futura sea la mejor. Creemos que todos los procesos de alternancia democrática que goza el pueblo deben contar con la participación de las fuerzas políticas, en este caso del Frente Para la Victoria. Martiniano es un amigo, nos conocemos desde hace muchos años y, como acordamos, vamos a trabajar juntos este proceso de transición. Nuestra posición siempre es trabajar con un sentido social, respetando los derechos de los trabajadores, que ya hemos acordado; después temas como Presupuesto, tasas, salarios, actividades de cada una de las áreas, personal; se lo vamos a dejar todo ordenado, firmado y vamos a hacer un acto público el día de la entrega. La semana que viene nos volveremos a juntar ya con gente de él y gente nuestra para que se vayan poniendo al tanto en cada área para facilitar las cosas. Esta es nuestra manera de colaborar en este momento”.
Servicios garantizados
Gutiérrez sostuvo que “garantizamos que todos los servicios (seguridad, iluminación, recolección, agua, salud, cultura, etcétera) seguirán en pleno funcionamiento para que la transición sea de la mejor manera posible y el próximo gobierno no encuentre que tiene que empezar de cero; el Municipio funcionará plenamente. En la reunión hemos hablado un poco de todo; de la campaña, en la que siempre tuvimos mucho respeto entre los dos, no hubo agresiones de ninguna parte. Todos los secretarios, directores y empleados tienen la orden de trabajar normalmente. Como dije la transición tiene que ser ordenada, respetuosa de la voluntad popular y el nuevo intendente Martiniano tiene que encontrarse con todo funcionando a pleno como corresponde. Nuestra actitud es demostrar que se puede tener un cambio político respetuoso. El que se va tiene que darle todas las condiciones al que llega para que empiece a ejercer su mandato de una manera prolija y ordenada, más allá de que haya coincidencia o no en las decisiones y las políticas futuras, pero ojalá coincidamos porque todos queremos lo mejor para Quilmes, para todos, no para algunos sí y otros no, si es para todos bienvenido”.
Finalmente, el jefe comunal destacó que de cara al balotaje del próximo 22 de noviembre “defendemos proyectos distintos y eso está bien, cada uno trabajará para que gane su candidato a presidente”.
Un buen ejemplo
Por su parte, Molina sostuvo que “el lunes me llamó el Barba al mediodía, me felicitó, fue una conversación amena, me planteó dos o tres puntos para resolver en esta transición, así que yo le agradezco el gesto”. Al ser consultado sobre si se fue conforme de la reunión que mantuvo con Francisco Gutiérrez, Martiniano dijo que: “absolutamente, yo daba por descontado que esto sería de esta manera, un poco por la relación que el Barba tiene con mi papá. Yo nunca agredí sino que siempre hablé de lo que creo y de lo que los vecinos me contaban. También tengo una excelente relación con Evangelina Ramírez, quien también me llamó para saludarme. Creo que eso es lo mejor que nos puede pasar a todos como quilmeños, porque en definitiva el Barba estuvo a cargo del Municipio y de la realidad de los vecinos durante ocho años y ahora los vecinos me eligieron a mí, con esta nueva impronta. Me parece que esta es una muy buena demostración y un buen ejemplo hacia otros Municipios que no lo han hecho de esta manera, no como sucedió cuando al Barba le tocó asumir luego de la gestión de Villordo. Después, como dijo el Barba, tendremos distintas miradas, de eso se trata la democracia, y desde el respeto cada uno luchara por sostener sus ideas”.
