6 de mayo de 2013

El abogado Sergio Doutres apelará la condena sobre el múltiple abusador sexual

El abogado de dos de las víctimas de violación, doctor Sergio Doutres, apelará el dictamen del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de Quilmes, que condenó a 22 años de cárcel a un ex convicto, que violó a cuatro mujeres entre 2009 y 2010 en el distrito.
El representante legal de dos de las mujeres abusadas había pedido 32 años de prisión por los hechos. "Discrepo rotundamente con el cálculo que se hace para la cuantificación de la pena", dijo Doutres.
Por su parte, la fiscal Roxana Valeria Meyer había solicitado que el acusado, Javier Leiva fuera condenado a 42 años de cárcel.
"Sí estoy conforme con el fallo, en el sentido en que (los jueces) no lo absolvieron por ninguno de los hechos, desde un punto material se hizo lugar a la acusación", consideró Doutres, que adelantó que apelará a la Cámara de Casación Penal en busca de obtener "más años" de prisión para el condenado.
Leiva era juzgado por "rapto en concurso ideal con abuso sexual gravemente ultrajante, en concurso real con robo"; "abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma en concurso real con robo agravado por el uso de arma"; "rapto en concurso ideal con abuso sexual agravado por acceso carnal y por el uso de arma"; y "abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma".
Las víctimas son cuatro mujeres que fueron atacadas entre mayo de 2009 y marzo 2010, en un radio de unas 25 cuadras a la redonda del domicilio del acusado, en Quilmes.
El modus operandi del abusador consistía en actuar en la vía pública, de noche y armado, les decía a sus víctimas que si pasaba la Policía tenían que simular ser novios y luego las llevaba hasta lugares apartados donde las sometía sexualmente.
Además, en dos de estos casos, el violador también se apoderó de las pertenencias de las víctimas, como la cartera y el teléfono celular, antes de huir.
Según Doutres, a una de las mujeres la interceptó cuando ésta sacó a pasear a su perro y su ADN quedó en el semen hallado en su ropa interior y en el collar del animal. Asimismo indicó que si bien el abusador tenía un patrón para atacar no lo tenía para "elegir el perfil de sus víctimas" ya que éstas diferían en edad y aspecto físico.
Por su parte, el violador fue detenido luego del primer hecho, pero lo excarcelaron poco después por falta de pruebas y recién fue apresado nuevamente tras el último abuso.
De hecho, las víctimas del segundo y tercer hecho se cruzaron en la calle y en el tren con su abusador días después de haber sido atacadas. Es por ello que el abogado Doutres calificó la investigación inicial como "lamentable".
Durante el debate, las cuatro víctimas relataron cómo fueron atacadas y ratificaron el reconocimiento que habían realizado del acusado en rueda de personas durante la instrucción de la causa. En tanto, el imputado, que en 2009 había recuperado la libertad tras purgar una condena de tres años por robo, no declaró durante el juicio y pidió no estar presente en ninguna de las audiencias.
Por otro lado, el abusador, actualmente alojado en el penal de Florencio Varela, fue investigado por tres abusos cometidos entre 2009 y 2010 en Quilmes y Berazategui, pero resultó desvinculado de los hechos que se le endilgaban sin mayores elementos probatorios.