"Es hora de grandezas"
La hora llegó y la crisis de las finanzas públicas se manifiesta concretamente. Lo que denunciamos en el año 2011 y que la gran mayoría se dedicó a negar, hoy es una realidad concreta que golpea fuertemente.
El camino elegido por los que tienen que gobernar fue negar la crisis, patear la pelota para adelante postergando pagos, pagando con bonos degradados y dejando para el olvido inversiones en infraestructura. Complementariamente, se ha llevado la presión fiscal hasta límites nunca vistos, especialmente en nuestra Pcia. La población, entonces, se pregunta en qué se gasta.
En este contexto, surge con fuerza la conflictividad gremial, dentro de un panorama plagado de mezquindades y que no muestra salida alguna.
Durante la campaña electoral del 2011 señalamos claramente la crisis fiscal, tanto en lo nacional como en lo provincial y municipal. Los responsables, o mejor dicho, los irresponsables, se encargaron de ocultarlo. Había que ganar las elecciones y para ello adormecer la conciencia pública con el consumo exacerbado; este fue el camino vuelto a practicar.
El tiempo pasa y es inexorable. La Nación le pasa el problema a la Provincia y esta a los Municipios. Pero eso no basta. Se recurre a dejar de pagar, aparecen los bonos, no se cumplen las inversiones comprometidas, pero aún así, no basta. Y la manifestación concreta fue el atraso del pago de la primera cuota del aguinaldo del 2012.
Planteado el conflicto y luego de más de un mes, a los ojos de la población pareció resolverse, se pagó el aguinaldo. Lo que se ocultó, no sólo desde los gobiernos nacional y provincial, sino también desde los medios de comunicación, es que no hubo auxilio nacional. Lo cierto es que, a través de la ANSES, se le otorgó un préstamo a la provincia: fueron 600 millones, con un interés superior al 15% anual, lo que significó para los bonaerenses una pérdida de 100 millones de pesos y un muerto a levantar.
Señalo esto porque esa salida preanunciaba la realidad que hoy vivimos. Puede verse claramente en el presupuesto provincial de… ¡138 mil millones! No se contempló aumento alguno para el personal estatal. Junto a ello, el proceso inflacionario profundizado por los formadores de precios y las cadenas de distribución en el último trimestre del 2012 y especialmente en enero pasado, configuraron la mezcla explosiva que hoy quema las manos de los que antes hicieron la vista gorda ante la crisis fiscal.
Para tener una idea concreta de lo que supone esta política de patear para adelante postergando inversiones, afirmo que en Quilmes la única inversión provincial en educación es la construcción de un pequeño Jardín de Infantes por 1.200.000 pesos, lo que significa una inversión anual de 2 pesos por cada habitante de Quilmes.
La Provincia se manifiesta imposibilitada de encontrar respuesta a los justos reclamos de los trabajadores. Pide auxilio a la Nación -la que se queda con la parte del león de los ingresos públicos, el 75% del total- y por la mezquindad política, se procede a apretar al gobernador para que este se arrodille aún más de lo que normalmente está. Se ha producido un nudo gordiano: La Provincia no tiene posibilidades financieras, la Nación le niega auxilio, no sólo por la mezquindad señalada, sino por su propia crisis fiscal. La población, entre ella los trabajadores estatales, es rehén. ¿Quién y cómo cortará el nudo?
Es hora de grandezas. Las actitudes calculadoras y mezquinas ya no tienen lugar. La grandeza está en buscar caminos nuevos que permitan una salida distinta a la que siempre se plantea.
Según el Secretario de ATE Buenos Aires, una mayoría importante de los agentes estatales ganan hasta 4.500 pesos mensuales. Esto nos indica claramente que una minoría de la burocracia pública se queda con la parte del león, percibiendo remuneraciones muy por encima de la media general.
Para fundamentar mi planteo consulté el Presupuesto 2013 de la Provincia. La información publicada en internet por el Ministerio de Economía no permite acceder a la composición del Gasto en Personal que asciende a 63.200 millones. Desde la opacidad de la información señalo tres cuestiones para comprender mejor:
• El presupuesto del Poder Legislativo no tiene ningún nivel de detalle. Son $ 1.550 millones en una sola bolsa. No se informa detalle alguno, ni cuanto personal ocupa, ni las dietas de los legisladores, nada. 130 legisladores manejan a su arbitrio semejante suma. ¿será esta la moneda de cambio para que voten la mayor carga tributaria de la historia provincial?
• Desde el cuadro ANALITICO POR REGIMEN ESTATUTARIO Y AGRUPAMIENTO EDUCACIONAL, para tener en claro que la información no es fiable señalo que la Magistratura, entendiendo por tal a los jueces de todos los fueros con excepción de los de Corte Suprema, que son 1567, tendrían un sueldo promedio de bolsillo de $ 11.100. ¿difícil de creer no? Habiendo consultado en el Departamento Judicial Quilmes, el sueldo de bolsillo de un Juez de primera instancia, es de $ 18.500 ¿cómo aceptar entonces el sueldo promedio antes citado?
• Aún desde la insuficiente información pública, afirmo que más de la mitad de los agentes estatales perciben sueldos de hasta $ 4.800 mensuales netos.
Considero que no es lo mismo aumentarle el 30% a quien gana $ 3.000 mensuales, que aumentarle en el mismo porcentaje al Presidente de la Corte Suprema de Justicia de Buenos Aires, que representa $ 24.600 más por mes.
Este es el gesto de grandeza que requiere la hora. Hay que achatar la pirámide salarial en todos los niveles del Estado. Hay que recuperar el poder adquisitivo de los de menor ingreso y que la burocracia pública política, que tiene ingresos más que suficientes, en una escala progresiva decreciente, tenga aumentos menores.
Somos un país rico con un Pueblo empobrecido. Quienes quieran conducir los procesos políticos, que pongan el suficiente coraje cívico y asuman la función pública con sentido patriótico y de servicio. Quienes no estén dispuestos a esta conducta, que dejen la función pública y en la calle ganen los ingresos que se creen merecer.
Es hora de grandezas, de gestos concretos, la función pública como servicio y no como fuente de enriquecimiento.
Podrán decirme que esto es una utopía y les contesto, sí, es una utopía. La utopía a la que hay que perseguir para cambiar el triste destino al que si no estamos condenados.
Un ejemplo concreto de esto es la última oferta que le hizo el gobierno provincial a los docentes. Desde todos los medios de comunicación, tanto oficialistas como de los grandes medios, se habla del 22,6%. Pero tal como se planteo el ajuste, si se anualiza, es decir de enero 2013 a diciembre 2013, da como resultado el 13%.
Y resalto que digo ajuste, ya que lo que se está planteando es una recuperación del poder adquisitivo ante la espiral inflacionaria concreta y anticipada. En este contexto hay que tener en claro que los salarios no son causa de la inflación, a lo sumo el ajuste es el intento de recuperar lo que se perdió.
Reitero, el planteo de un ajuste uniforme para todos no es la salida. Lo que se manifestó en junio del año pasado con el aguinaldo, va a ocurrir cada vez con mayor frecuencia, en tiempos más breves, conduciendo a una imposibilidad de funcionamiento. Si el funcionariado no quiere actuar con grandeza, es el Pueblo el que tiene que tomar conciencia que no hay otro camino para encontrar una salida. Y desde esa toma de conciencia, concluir que la grandeza que reclama la situación sólo será posible con una dirigencia política que viva la suerte del Pueblo y por lo tanto digamos basta a una dirigencia que sólo se plantea la política como forma de enriquecimiento y poder.
Juan Aníbal Albaytero
Proyecto Sur Quilmes
La hora llegó y la crisis de las finanzas públicas se manifiesta concretamente. Lo que denunciamos en el año 2011 y que la gran mayoría se dedicó a negar, hoy es una realidad concreta que golpea fuertemente.
El camino elegido por los que tienen que gobernar fue negar la crisis, patear la pelota para adelante postergando pagos, pagando con bonos degradados y dejando para el olvido inversiones en infraestructura. Complementariamente, se ha llevado la presión fiscal hasta límites nunca vistos, especialmente en nuestra Pcia. La población, entonces, se pregunta en qué se gasta.
En este contexto, surge con fuerza la conflictividad gremial, dentro de un panorama plagado de mezquindades y que no muestra salida alguna.
Durante la campaña electoral del 2011 señalamos claramente la crisis fiscal, tanto en lo nacional como en lo provincial y municipal. Los responsables, o mejor dicho, los irresponsables, se encargaron de ocultarlo. Había que ganar las elecciones y para ello adormecer la conciencia pública con el consumo exacerbado; este fue el camino vuelto a practicar.
El tiempo pasa y es inexorable. La Nación le pasa el problema a la Provincia y esta a los Municipios. Pero eso no basta. Se recurre a dejar de pagar, aparecen los bonos, no se cumplen las inversiones comprometidas, pero aún así, no basta. Y la manifestación concreta fue el atraso del pago de la primera cuota del aguinaldo del 2012.
Planteado el conflicto y luego de más de un mes, a los ojos de la población pareció resolverse, se pagó el aguinaldo. Lo que se ocultó, no sólo desde los gobiernos nacional y provincial, sino también desde los medios de comunicación, es que no hubo auxilio nacional. Lo cierto es que, a través de la ANSES, se le otorgó un préstamo a la provincia: fueron 600 millones, con un interés superior al 15% anual, lo que significó para los bonaerenses una pérdida de 100 millones de pesos y un muerto a levantar.
Señalo esto porque esa salida preanunciaba la realidad que hoy vivimos. Puede verse claramente en el presupuesto provincial de… ¡138 mil millones! No se contempló aumento alguno para el personal estatal. Junto a ello, el proceso inflacionario profundizado por los formadores de precios y las cadenas de distribución en el último trimestre del 2012 y especialmente en enero pasado, configuraron la mezcla explosiva que hoy quema las manos de los que antes hicieron la vista gorda ante la crisis fiscal.
Para tener una idea concreta de lo que supone esta política de patear para adelante postergando inversiones, afirmo que en Quilmes la única inversión provincial en educación es la construcción de un pequeño Jardín de Infantes por 1.200.000 pesos, lo que significa una inversión anual de 2 pesos por cada habitante de Quilmes.
La Provincia se manifiesta imposibilitada de encontrar respuesta a los justos reclamos de los trabajadores. Pide auxilio a la Nación -la que se queda con la parte del león de los ingresos públicos, el 75% del total- y por la mezquindad política, se procede a apretar al gobernador para que este se arrodille aún más de lo que normalmente está. Se ha producido un nudo gordiano: La Provincia no tiene posibilidades financieras, la Nación le niega auxilio, no sólo por la mezquindad señalada, sino por su propia crisis fiscal. La población, entre ella los trabajadores estatales, es rehén. ¿Quién y cómo cortará el nudo?
Es hora de grandezas. Las actitudes calculadoras y mezquinas ya no tienen lugar. La grandeza está en buscar caminos nuevos que permitan una salida distinta a la que siempre se plantea.
Según el Secretario de ATE Buenos Aires, una mayoría importante de los agentes estatales ganan hasta 4.500 pesos mensuales. Esto nos indica claramente que una minoría de la burocracia pública se queda con la parte del león, percibiendo remuneraciones muy por encima de la media general.
Para fundamentar mi planteo consulté el Presupuesto 2013 de la Provincia. La información publicada en internet por el Ministerio de Economía no permite acceder a la composición del Gasto en Personal que asciende a 63.200 millones. Desde la opacidad de la información señalo tres cuestiones para comprender mejor:
• El presupuesto del Poder Legislativo no tiene ningún nivel de detalle. Son $ 1.550 millones en una sola bolsa. No se informa detalle alguno, ni cuanto personal ocupa, ni las dietas de los legisladores, nada. 130 legisladores manejan a su arbitrio semejante suma. ¿será esta la moneda de cambio para que voten la mayor carga tributaria de la historia provincial?
• Desde el cuadro ANALITICO POR REGIMEN ESTATUTARIO Y AGRUPAMIENTO EDUCACIONAL, para tener en claro que la información no es fiable señalo que la Magistratura, entendiendo por tal a los jueces de todos los fueros con excepción de los de Corte Suprema, que son 1567, tendrían un sueldo promedio de bolsillo de $ 11.100. ¿difícil de creer no? Habiendo consultado en el Departamento Judicial Quilmes, el sueldo de bolsillo de un Juez de primera instancia, es de $ 18.500 ¿cómo aceptar entonces el sueldo promedio antes citado?
• Aún desde la insuficiente información pública, afirmo que más de la mitad de los agentes estatales perciben sueldos de hasta $ 4.800 mensuales netos.
Considero que no es lo mismo aumentarle el 30% a quien gana $ 3.000 mensuales, que aumentarle en el mismo porcentaje al Presidente de la Corte Suprema de Justicia de Buenos Aires, que representa $ 24.600 más por mes.
Este es el gesto de grandeza que requiere la hora. Hay que achatar la pirámide salarial en todos los niveles del Estado. Hay que recuperar el poder adquisitivo de los de menor ingreso y que la burocracia pública política, que tiene ingresos más que suficientes, en una escala progresiva decreciente, tenga aumentos menores.
Somos un país rico con un Pueblo empobrecido. Quienes quieran conducir los procesos políticos, que pongan el suficiente coraje cívico y asuman la función pública con sentido patriótico y de servicio. Quienes no estén dispuestos a esta conducta, que dejen la función pública y en la calle ganen los ingresos que se creen merecer.
Es hora de grandezas, de gestos concretos, la función pública como servicio y no como fuente de enriquecimiento.
Podrán decirme que esto es una utopía y les contesto, sí, es una utopía. La utopía a la que hay que perseguir para cambiar el triste destino al que si no estamos condenados.
Un ejemplo concreto de esto es la última oferta que le hizo el gobierno provincial a los docentes. Desde todos los medios de comunicación, tanto oficialistas como de los grandes medios, se habla del 22,6%. Pero tal como se planteo el ajuste, si se anualiza, es decir de enero 2013 a diciembre 2013, da como resultado el 13%.
Y resalto que digo ajuste, ya que lo que se está planteando es una recuperación del poder adquisitivo ante la espiral inflacionaria concreta y anticipada. En este contexto hay que tener en claro que los salarios no son causa de la inflación, a lo sumo el ajuste es el intento de recuperar lo que se perdió.
Reitero, el planteo de un ajuste uniforme para todos no es la salida. Lo que se manifestó en junio del año pasado con el aguinaldo, va a ocurrir cada vez con mayor frecuencia, en tiempos más breves, conduciendo a una imposibilidad de funcionamiento. Si el funcionariado no quiere actuar con grandeza, es el Pueblo el que tiene que tomar conciencia que no hay otro camino para encontrar una salida. Y desde esa toma de conciencia, concluir que la grandeza que reclama la situación sólo será posible con una dirigencia política que viva la suerte del Pueblo y por lo tanto digamos basta a una dirigencia que sólo se plantea la política como forma de enriquecimiento y poder.
Juan Aníbal Albaytero
Proyecto Sur Quilmes