Vecinos del barrio “La Cañada” de Quilmes Oeste denunciaron invasión de ratas
HACE ALGUNAS SEMANAS UN GRUPO DE VECINOS DE LAS CALLES JUJUY, LA RIOJA Y DESDE 390 HASTA EL ARROYO, DEL BARRIO LA CAÑADA DE QUILMES OESTE, NOS HIZO LLEGAR UNA SERIE DE RECLAMOS QUE PREVIAMENTE HABÍAN SIDO ELEVADOS AL MUNICIPIO; PERO NUNCA OBTUVIERON RESPUESTA.
HACE ALGUNAS SEMANAS UN GRUPO DE VECINOS DE LAS CALLES JUJUY, LA RIOJA Y DESDE 390 HASTA EL ARROYO, DEL BARRIO LA CAÑADA DE QUILMES OESTE, NOS HIZO LLEGAR UNA SERIE DE RECLAMOS QUE PREVIAMENTE HABÍAN SIDO ELEVADOS AL MUNICIPIO; PERO NUNCA OBTUVIERON RESPUESTA.
El reclamo más acuciante es la necesidad de una urgente desratización, ya que “estamos invadidos por las ratas”, dice Zulma de la calle la Rioja. Fueron al municipio y de allí los mandaron a la delegación municipal de Bernal Centro; en ésta les ofrecieron como solución ¡una bolsita de veneno! Para toda la zona. La preocupación hoy es mayor porque hace algunos años se registró un caso de leptospirosis. En la recorrida por el barrio, pudimos apreciar el estado de abandono; basura, luminarias rotas, falta de zanjeo y agua acumulada en las cuadras de acceso al arroyo. Dice el Sr. Fernández de la calle La Rioja: “Es impresionante. Ahora que se ocuparon los terrenos del otro lado, las ratas se vinieron todas para acá. Son enormes”. 
Y agrega Zulma: “En tiempos de Geronés murió una chica embarazada de leptopirosis; pero ahora el municipio dice que no tiene presupuesto. Me mandaron a Bernal y ahí me dieron un cuarto de sebo: ‘Arréglese y después vemos’, me dijeron. La situación es crítica y no queremos que pase lo que pasó con aquella chica. Estamos levantando firmas para reclamarle al intendente. Si no, tendremos que tomar otras medidas; acá hay chicos, abuelos…no queremos llegar a eso”. A su vez, Marcela agrega que pese a la altura del año, también abundan los mosquitos. Nunca vinieron a fumigar, ni en tiempos del dengue. Acá nunca viene ningún funcionario. El intendente vino una vez, para unas internas; después no apareció nunca más. Somos los últimos, siempre pasa lo mismo. Hay chicos con infecciones, problemas pulmonares por la humedad; y en verano no hay una gota de agua”. Agua estancada, basura, zanjas tapadas… las ratas, agradecidas. (FUENTE: Panorama del Sur)
