23 de marzo de 2011

UN KIOSQUERO DE QUILMES OESTE, HARTO DE QUE LE ROBEN MIENTRAS SACA FOTOCOPIAS, ATIENDE A PUERTAS CERRADAS SU NEGOCIO

El negocio de Andrés Baranda y Presidente Perón de Quilmes Oeste varias veces fue víctima de robos, donde mujeres y ancianos protagonizaron los hurtos

CANSADO DE LOS HURTOS Y ROBOS POR PARTE DE EMBARAZADAS, NIÑOS Y ANCIANOS, EL DUEÑO DE UN KIOSCO DE QUILMES OESTE DECIDIÓ NO ABRIR MÁS LA PUERTA Y ATENDER POR UNA VENTANILLA. EN LA PUERTA PEGÓ UN CARTEL QUE DICE: "NO SE ABRE LA PUERTA PORQUE MIENTRAS SACO FOTOCOPIAS ME ROBAN". 

Rodolfo Varela hace 22 años que tiene su kiosco en la esquina de Andrés Baranda y Presidente Perón de Quilmes Oeste. Sufrió alrededor de 35 asaltos a mano armada. 
Sin embargo, esos no fueron los únicos. 
Cansado de los hurtos por parte de niños, maestras, mujeres embarazadas y ansianos que en más de una oportunidad se llevaron galletitas, biromes, cigarillos y lo que tienen a la mano, el comerciante decidió cerrar las puertas y atender por una ventanilla.