EL DOCUMENTO QUE EL RADICALISMO QUILMEÑO ELABORÓ SOBRE LA CRISIS POLÍTICA DEL HCD QUILMES: ES UN LARGO ESCRITO FIRMADO POR LA TITULAR DEL COMITÉ DE DISTRITO, MARÍA ELISA EZQUERRA, EN ÉL QUE SE CRITICA AL INTENDENTE GUTIÉRREZ.
A continuación el documento:
“En estos últimos días hemos asistido a la profundización de la parálisis del HCD de Quilmes. Desde el mes de diciembre fracasaron 11 sesiones convocadas por uno u otro sector que trabaron durante estos meses; el funcionamiento de las Comisiones, el diálogo, el debate y la búsqueda de respuestas para los múltiples y graves problemas que afectan a distintos sectores de la comunidad. 1.- El responsable primario de la situación de desgobierno en el H. Concejo Deliberante de Quilmes es el Intendente Municipal, responsable del Poder Ejecutivo, Sr. Francisco Gutiérrez, quien desconociendo la elemental división de poderes propios de un sistema republicano de gobierno, se inmiscuye en cuestiones que son de competencia exclusiva del Poder Legislativo.
Veladamente, de esta manera, atribuye la parálisis de su gobierno a las dificultades que atraviesa el HCD, como si los problemas de Quilmes, parte de los cuales se deben a la inoperancia de su gestión, fueran a resolverse de un día para otro a partir de que la Presidencia del Concejo Deliberante pase a ser un apéndice más de su gobierno.
El Intendente Gutiérrez no puede ni debe excusarse en esta situación para esconder sus debilidades.
Es importante recordar que la actual presidencia del Concejo fue establecida de manera legítima en sesión del HCD y por la mayoría de sus miembros en el mes de diciembre próximo pasado.
2.- Es falso el planteo de que para gobernar, el Intendente necesita controlar la Presidencia del H. Concejo Deliberante.
Desde un punto de vista más filosófico, la doctrina de la separación de poderes, tal como la expone Montesquieu, se inspira en una concepción de la unidad de los organismos vivientes. La unidad del todo se entenderá como el resultado de un equilibrio dinámico entre partes, miembros, Estados, órganos que logran contrapesarse.
Sobradas muestras hay de convivencia de Ejecutivos con Legislativos Opositores.
3.- Nuestra política en los cuerpos legislativos fue y es, en caso de paridad, que la presidencia sea desempeñada por aquellos que ocupan la primera minoría del cuerpo colegiado, priorizando la gobernabilidad y el adecuado funcionamiento de los mismos. Este criterio primó en las distribuciones de la Cámara de Diputados y de Senadores Nacionales y también en las Cámaras Provinciales.
Sin perjuicio de lo dicho, es importante recalcar que la parálisis del HCD se debe centralmente al accionar de intendente municipal, ya que es falaz la igualdad de responsabilidades, El gobierno de Gutiérrez se resiste a asumir que es incapaz de tener una mayoría que le permita generar de manera legítima el recambio de autoridades que auspicia. El HCD de Quilmes y por consiguiente, las instituciones de la Ciudad, están siendo víctimas de una vil extorsión, a punto tal de violar la tradición parlamentaria de iniciación de Sesiones Ordinarias en el intento de forzar una situación que lo favorezca. A estas alturas, podríamos asimilar esta realidad, a una conspiración del Poder Ejecutivo sobre el Legislativo.
4.- Ratificamos nuestro rol opositor, en el que los quilmeños nos han ubicado y que venimos expresando a diario en nuestro accionar en el Concejo Deliberante, a la vez que reafirmamos nuestra vocación de compartir con el Acuerdo Cívico y Social la misma política opositora al Gobierno Justicialista del Municipio de Quilmes.
5.- El Radicalismo no cuestiona las justas aspiraciones del partido justicialista a cargo del Poder Ejecutivo, a presidir el HCD. La UCR solo reclama el funcionamiento de las instituciones para producir los cambios que se consideren pertinentes. Cualquier modificación en las autoridades del cuerpo necesitaría de una mayoría por parte del oficialismo que le permita de manera legítima alzarse con la Presidencia del Cuerpo. De ésta forma, las nuevas autoridades del Legislativo revestirían la misma legitimidad de origen que revisten las actuales que el oficialismo desconoce.
6.- Los acuerdos a los que debemos arribar no nos deben alejar de representar los mismos principios e ideales que nos embanderan en la Unión Cívica Radical y en el Acuerdo Cívico y Social. Aquí en Quilmes, como en el país, nuestra vocación política se fundamenta en el interés colectivo, la mejora de las condiciones de vida de nuestros vecinos y repudiamos cualquier degradación de la política fundada en los negocios económicos o en el beneficio personal.
7.- Como advirtió el cardenal Bergoglio en la homilía del último Jueves Santo, “...El pueblo esta cansado de las agresiones, los enfrentamientos y la crispación”. Más recientemente en la homilía de la misa por la educación criticó las internas mezquinas y exhortó a los dirigentes a “dar testimonio y trabajar en lo que hemos recibido para hacer crecer la patria y proyectarla hacia el futuro”, para evitar que “nuestra vida termine en un rincón de la existencia llorando la milonga de nuestro fracaso”.
El Poder Legislativo forma parte del gobierno, es necesario que oficialismo y oposición faciliten su funcionamiento buscando los acuerdos mínimos que posibiliten las respuestas que la sociedad espera, deponiendo personalismos y actitudes más vinculadas con la especulación política o la búsqueda de intereses personales o grupales, que con el interés publico.
8.- En este contexto, la Unión Cívica Radical de Quilmes y su representación en el Concejo Deliberante ratifican su indeclinable vocación de ejercer una oposición seria y eficiente, que sea la plataforma de la construcción de una fuerza con posibilidad de revertir los malos gobiernos del peronismo local, para lo cual llamamos a realizar una férrea defensa del Acuerdo Cívico y Social. En este sentido, ninguna posición será adoptada si no resulta del consenso con las otras fuerzas que conforman ese Acuerdo.
9.- Instamos en este contexto de gravedad institucional y político nunca antes vivido en nuestra ciudad, a coordinar las políticas a asumir por parte de los legisladores comunales, en instancias orgánicas provinciales de los partidos comprometidos con el Acuerdo Cívico y Social.
10.- Por todo esto, requerimos de las Fuerzas Políticas del distrito de Quilmes un comportamiento acorde a las necesidades de nuestros ciudadanos y de respeto por las instituciones de la democracia. Instamos al Sr. Intendente y a los Sres. Concejales a debatir las iniciativas que mejoren las condiciones de vida de nuestros conciudadanos y dejen de lado las vanidades personales”.
Ricardo fuentes Juliana Salguero María Elisa Ezquerra
Sec. General Vicepresidente Presidente
Sec. General Vicepresidente Presidente
