"Hola a todas las personas que integran la comunidad educativa de la EES 22.
No queríamos molestarlos durante el receso invernal pero la situación lo amerita. Quizás se enteraron que entraron a robar en dos o tres oportunidades a la escuela durante esta pandemia y se llevaron todo: los instrumentos musicales, las netbooks nuevas que ni siquiera estrenaron, las viejas que se usaban en el aula y las que dejaron para arreglos, equipos y consolas de audio, DVD, ventiladores y estufas, entre otras cosas. Es lamentable que suceda esto ya que cada elemento que se llevaron costó muchísimo y muchos de ellos son irrecuperables.
Quizás para aquel que es de afuera, dirá y pensará: es otro robo más de los que tanto hay en el barrio o en el municipio. Pero para nosotros es todo... significa que ya no podremos ensayar para bailar en un acto, que no puedan tocar los instrumentos en la hora de música, que no puedan ver una película durante las horas de clases, que ya no puedan usar las computadoras en hora de NTICX, por ejemplo. Lo más doloroso es que cada cosa que se llevaron desata un lazo de afecto que formamos... Esa alegría que notamos en el aire cada vez que Alicia los hace practicar pasos y bailar. Ese lazo que a simple vista no se ve, pero se siente cada vez que la profe Nati, el profe Emiliano, el profe Sergio o el profe Jorge les pide que vayan a buscar la guitarra, el bajo, las cajas peruanas, la pandereta o el bombo y salen con un entusiasmo que se nota en el brillo de sus ojos para producir esa música que los caracteriza y que es tan única como ustedes.
Hoy estamos tristes, muy decepcionados y queremos que el barrio se entere cómo nos sentimos... tal vez de esa forma nos entiendan, se pongan un poquito en nuestros zapatos y colaboren para que esto no suceda más, para que estén atentos a los movimientos que ocurren y que no se callen si van a ofrecerles cosas que sacaron de la escuela. Queremos que se sepa que tanto para docentes como para alumnos la escuela es nuestro segundo hogar, donde compartimos mañanas, tardes o atardeceres con compañeros y amigos, donde aprendemos, debatimos ideas y a veces intercambiamos pensamientos siempre con mucho respeto. Es allí donde conocemos personas que nos dejarán huellas en la vida, donde surgen ideas alocadas; es allí donde nos reímos, renegamos, compartimos un mate, charlamos en el recreo, lloramos, nos enamoramos, nos emocionamos, nos enojamos, nos alegramos… Es el lugar donde siempre alguien nos va a escuchar y tratar de ayudar; dónde podemos expresar todo lo que nos pasa con libertad y dónde nunca nos sentimos solos. Es NUESTRO LUGAR…"
