Sergio "Maravilla" Martínez y Martin Murray brindaron una conferencia de prensa como antesala de la pelea del próximo sábado en el estadio de Vélez. El argentino dijo estar "mejor que nunca" con una motivación "superlativa", pero reconoció que su rodilla sigue con problemas.
Maravilla y su corona, que pondrá en juego por primera vez el próximo sábado Foto: NA Maravilla y su corona, que pondrá en juego por primera vez el próximo sábado.
El argentino Sergio “Maravilla” Martínez (38) y el inglés Martín Murray (30) brindaron una conferencia de prensa en el salón Retiro del Hotel Sheraton, como presentación de la pelea que sostendrán el próximo sábado en el estadio de Vélez Sarsfield.
“Estoy de puta madre, preparado mejor que nunca para darles el mejor espectáculo el sábado”, comenzó Martínez.
“¿Vamos a tener nocaut? Sí vamos a tenerlo”, dijo un verborrágico Maravilla.
“Mi personalidad es aplastante, me siento el más grande del mundo”, dijo entusiasmado el oriundo de Quilmes.
“Estoy mejor que nunca para ganar por knock out”, dijo en un pasaje de la conferencia, pero reconoció que la rodilla le duele, y que su tobillo tiene varios huesos limados.
“Trabaje más que nunca. Mi motivación es extrema, superlativa, por luchar en mi país”, expresó un exultante Maravilla.
También, fiel a su estilo, le respondió al manager de Murray que había dicho que van a derrotar al argentino: “Va a ver de rodillas a su pupilo”, sentenció.
"Si llueve vamos a pasarla de puta madre bajo el agua. Vamos a luchar y luchar hasta el último día", agregó el argentino.
Murray le agradeció a Maravilla por darle la oportunidad de venir a pelear con él, y aclaró que “está listo” para este desafío, y el sábado a la noche se lo va a demostrar al mundo.
Maravilla, con su look habitual de remera, saco y lentes oscuros, ingresó al salón con la música de la su amigo, René de Calle 13. Al argentino se lo vio sonriente y relajado como siempre. El inglés, vestido con chomba roja, filmó una parte de la conferencia con su teléfono celular, sorprendido por el gran marco del evento.
Pablo Sarmiento, el entrenador de Maravilla, dijo que está muy bien preparado y que no va a dudar en noquear a Murray antes del 9 asalto.
Desde el equipo de Murray, dijeron que no vinieron a Argentina por un “evento social”, sino porque creen que tienen una chance genuina de conquistar el cinturón de la CMB.
El inglés (actual campeón mediano de la Asociación Mundial de Boxeo) intentará arrebatarle la corona de los medianos del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) a “Maravilla”, título que ostenta desde septiembre del año pasado, cuando venció por puntos al mexicano Julio César Chávez.
El CMB confirmó las autoridades que controlarán el combate mundialista: el árbitro será el italiano Massimo Barrovecchio, mientras que el jurado estará compuesto por Nicolás Hidalgo, de Venezuela, el filipino Rey Danseco y Alejandro Rochín, de México. El pesaje de ambos pugilistas será el viernes a las 11 de la mañana.
El marco será impresionante. Se esperan unas 40 mil personas, y la recaudación superará los 20 millones de pesos, récord absoluto para un evento deportivo en Argentina.
El manager de Maravilla, Sampson Lewkowicz, en la previa afirmó que "llueva o no llueva", la pelea se realizará igual. El pronóstico meteorológico no es alentador en este sentido, pero parece que la histórica velada de no suspende por nada en el mundo.
El argentino Sergio “Maravilla” Martínez (38) y el inglés Martín Murray (30) brindaron una conferencia de prensa en el salón Retiro del Hotel Sheraton, como presentación de la pelea que sostendrán el próximo sábado en el estadio de Vélez Sarsfield.
“Estoy de puta madre, preparado mejor que nunca para darles el mejor espectáculo el sábado”, comenzó Martínez.
“¿Vamos a tener nocaut? Sí vamos a tenerlo”, dijo un verborrágico Maravilla.
“Mi personalidad es aplastante, me siento el más grande del mundo”, dijo entusiasmado el oriundo de Quilmes.
“Estoy mejor que nunca para ganar por knock out”, dijo en un pasaje de la conferencia, pero reconoció que la rodilla le duele, y que su tobillo tiene varios huesos limados.
“Trabaje más que nunca. Mi motivación es extrema, superlativa, por luchar en mi país”, expresó un exultante Maravilla.
También, fiel a su estilo, le respondió al manager de Murray que había dicho que van a derrotar al argentino: “Va a ver de rodillas a su pupilo”, sentenció.
"Si llueve vamos a pasarla de puta madre bajo el agua. Vamos a luchar y luchar hasta el último día", agregó el argentino.
Murray le agradeció a Maravilla por darle la oportunidad de venir a pelear con él, y aclaró que “está listo” para este desafío, y el sábado a la noche se lo va a demostrar al mundo.
Maravilla, con su look habitual de remera, saco y lentes oscuros, ingresó al salón con la música de la su amigo, René de Calle 13. Al argentino se lo vio sonriente y relajado como siempre. El inglés, vestido con chomba roja, filmó una parte de la conferencia con su teléfono celular, sorprendido por el gran marco del evento.
Pablo Sarmiento, el entrenador de Maravilla, dijo que está muy bien preparado y que no va a dudar en noquear a Murray antes del 9 asalto.
Desde el equipo de Murray, dijeron que no vinieron a Argentina por un “evento social”, sino porque creen que tienen una chance genuina de conquistar el cinturón de la CMB.
El inglés (actual campeón mediano de la Asociación Mundial de Boxeo) intentará arrebatarle la corona de los medianos del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) a “Maravilla”, título que ostenta desde septiembre del año pasado, cuando venció por puntos al mexicano Julio César Chávez.
El CMB confirmó las autoridades que controlarán el combate mundialista: el árbitro será el italiano Massimo Barrovecchio, mientras que el jurado estará compuesto por Nicolás Hidalgo, de Venezuela, el filipino Rey Danseco y Alejandro Rochín, de México. El pesaje de ambos pugilistas será el viernes a las 11 de la mañana.
El marco será impresionante. Se esperan unas 40 mil personas, y la recaudación superará los 20 millones de pesos, récord absoluto para un evento deportivo en Argentina.
El manager de Maravilla, Sampson Lewkowicz, en la previa afirmó que "llueva o no llueva", la pelea se realizará igual. El pronóstico meteorológico no es alentador en este sentido, pero parece que la histórica velada de no suspende por nada en el mundo.