Martiniano Molina asistió a la misa que el obispo de Quilmes, monseñor
Carlos José Tissera, ofreció en la Iglesia Catedral en honor a la
Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, Patrona de la
ciudad, al cumplirse 150 años de la inauguración del templo
parroquial. Junto a su esposa Ileana Luetic, el intendente de Quilmes
descubrió una placa por el aniversario de la iglesia y resaltó los
valores religiosos de la Madre y Patrona de Quilmes.
El obispo de la Diócesis de Quilmes, Berazategui y Florencio Varela
remarcó en su homilía la devoción de los cristianos, que cada 8 de
diciembre celebran el Día de la Virgen y la pujanza del pueblo que
construyó el templo en el 200° Aniversario de la ciudad: “Hoy se une
un acontecimiento histórico y particular para la comunidad quilmeña,
los 150 años de la consagración, la inauguración, de este templo
parroquial en ese entonces, y desde hace 40 años templo mayor
diocesano Iglesia Catedral”.
Solemnidad de la Inmaculada Concepción
La celebración comenzó con la tradicional procesión por las calles de
Quilmes y el rezo de la novena a la Inmaculada.
Luego, se realizó el descubrimiento de la placa recordatoria:
“Municipalidad de Quilmes, 1866-2016. Pueblo y Gobierno de Quilmes, en
el 150° Aniversario de la Inauguración del Templo Parroquial
Inmaculada Concepción, 8 de diciembre Martiniano Molina Intendente”,
que fue bendecida por monseñor Tissera.
En la Santa Misa destacaron la presencia del párroco de la Catedral,
pbro. Oscar Marchessi, el obispo emérito de Quilmes, monseñor Luis
Stöckler, los sacerdotes de la
Diócesis y el saludo de monseñor Marcelo Daniel Colombo, obispo de La
Rioja, anteriormente párroco de la Catedral de la Inmaculada
Concepción de Quilmes (2009).
Al finalizar la solemnidad, el intendente Molina compartió una cena
comunitaria. Acompañaron al mandatario comunal, la auditora general de
la Municipalidad de Quilmes, Myriam Pucheta, el secretario de
Gobierno, Guillermo Galetto., el titular de la Agencia de
Fiscalización y Control Municipal, Gonzalo Ponce, el secretario
Privado, Roberto Reale, la subsecretaria de Seguridad Ciudadana,
Analía Pauluzzi, el titular de la subsecretaría de Deportes, Cristian
Manentti y el director de Culto de la Municipalidad de Quilmes,
Luciano Bizin.
La parroquia de la Inmaculada Concepción (Iglesia Catedral de la
Diócesis de Quilmes), fue escenario de distintos hechos históricos.
Varios de sus párrocos y feligreses desempeñaron papeles de
importancia en la vida civil de la nación que estaba naciendo.
Santiago Rivas, párroco desde 1807, fue iniciador y vocero del
movimiento que culminó en la extinción de la Reducción, se interesó
vivamente por la actividad política de la zona y llegó a formar parte
de la Cámara de Representantes como diputado por la sección electoral
de Quilmes-Magdalena. Falleció en 1835 y sus restos descansan en el
atrio de la Catedral.
Cabe destacar el legado de 25 años de servicio a la evangelización, la
opción preferencial por los pobres, la defensa de los derechos humanos
y el diálogo ecuménico en la Diócesis de Quilmes del primer obispo de
la Diócesis, monseñor Jorge Novak. Su cuerpo descansa en la Catedral
de Quilmes, al lado de los restos del obispo Gerardo Farrell.